Hua T'o
VIDA DE HUA T'O
Hua T'o nació en el distrito chino de Po, en la provincia de Anhewei, en el año 141 d. JC., y por lo tanto en la Dinastía Han posterior (25-220 d. JC.); trabajó en las provincias de Shandong, Jiangsu, Honan y Anhui. Era un gran cirujano especialista en medicina interna, ginecología y pediatría, además de ser un gran experto en acupuntura, siendo uno de los pocos médicos de la época que podía tratar muy distintas enfermedades con resultados óptimos.
En aquellos tiempos, por falta de anestésia en las operaciones quirúrgicas, los pacientes sufrían mucho dolor y muchos de ellos morían a consecuencia del shock. Preocupado por ello Hua T'o realizó repetidos estudios sobre hierbas medicinales con el fin de crear un analgésico eficaz. Estos experimentos dieron como resultado la sintetización de un analgésico de efecto total para cualquier operación al cual llamó Ma Fei San, y consistía básicamente en una mezcla de extracto de cáñamo y vino de arroz, con la que pudo efectuar difíciles intervenciones quirúrgicas totalmente indoloras, siendo las primeras operaciones en el cuerpo humano que se hacían con anestesia general.
Más tarde esta anestesia se difundió por Japón, Corea, Arabia y África del Norte, siendo más de mil años más antigua que las primeras anestesias de los países occidentales.
Hua T'o consideraba que: "los hombres deben moverse con frecuencia para lograr una circulación normal de la sangre y evitar las enfermedades", por lo que creó, inspirándose en los movimientos de los animales, una especie de gimnasia preventiva de enfermedades que daba gran salud a los que la practicaba, y que además servía como método de autodefensa. Hua T'o denominó Wu Chin Si a este nuevo estilo interno de Kung-fu que imitaba los movimientos de los animales.
Ya sus primeros discípulos se beneficiaron de las ventajas de la práctica continuada de este nuevo estilo: Wu Pu y Faen Ya, vivieron más de noventa años con toda la dentadura, con una excelente vista y con un buen oído, además de haber salido victoriosos de todas las confrontaciones que tuvieron contra los bandoleros que asolaban el país.
Entre sus numerosos pacientes figuró el también famoso general Kwang Kung, uno de los héroes más conocidos de la historia china, creador de una de las armas más características del Kung Fu/Wu Shu: el Kwang Tao, y elevado a los círculos celestiales con el grado de "dios de la guerra". Hua T'o realizó una milagrosa cura en el brazo del famosísimo general al extraerle una flecha envenenada, motivo por el cual muchos soldados morían a diario en aquella época guerrera.
Hua T'o murió de la forma más curiosa que podáis imaginaros: intentando sanar a un paciente. El enemigo jurado de Kwang Kung, el usurpador Ts'ao Ts'ao, sufría de insoportables dolores de cabeza, posiblemente producidos por un tumor cerebral. Como hasta el usurpador había llegado la noticia de la rápida curación de la herida mortal de su enemigo, llamó a Hua T'o para que tratara su enfermedad; el famoso médico, después de estudiar al paciente, decidió que lo mejor era operar, por lo cual dijo a Ts'ao Ts'ao que necesitaba administrarle su anestesia para poder abrirle la cabeza; en un principio el usurpador accedió pero cuando Hua T'o se disponía a iniciar la trepanación, a Ts'ao Ts'ao se le ocurrió que el médico podía haber sido sobornado y que todo el diagnóstico era un complot para asesinarle pensado por su enemigo, por lo que impidió la operación sobre su persona, mandó encarcelar a Hua T'o y, posteriormente, ordenó que le ejecutaran cortándole la cabeza; corría el año 203. Desafortunadamente para Ts'ao Ts'ao, Hua T'o no erró en su diagnóstico y tenía razón en intentar operar, pues poco después, en aquel mismo año, murió a consecuencia de los fortísimos dolores de cabeza.
Por desgracia, apenas se ha conservado nada de los extensos escritos médicos de Hua T'o. Se dice que antes de su ejecución dio orden de que fuese quemada toda su obra. Según otra versión fue su mujer, ignorante del inmenso valor de aquellos escritos, quien los arrojó al fuego mientras que el médico estaba encarcelado.
Siglos después, en reconocimiento a su extraordinario talento médico, fue elevado por los chinos al rango de "dios de la cirugía".
EL WU CHIN SI
La transcripción en chino moderno (pinyin) es: Wu Qin Xi, y es un método que ha llegado hasta nuestros días.
Son unos ejercicios gimnástico-marciales creados por Hua T`o (básicamente un kuen de cinco animales), los cuales están incluidos dentro de las técnicas chinas de "protección de vida" (Wei Cheng), y consisten en una serie de movimientos destinados al desarrollo y fortalecimiento de los órganos internos, en la tonificación del sistema nervioso y en la educación del Chi. También se usan estos ejercicios como prevención de enfermedades, y como remedio para curar o mejorar enfermedades crónicas.
Además de todas las ventajas referidas, al Wu Chin Si siempre se le ha considerado como uno de los primeros estilos internos de Kung-fu, ya que Hua T'o unió, por primera vez en la historia, las técnicas respiratorias taoístas, con una larga serie de ejercicios que además de dar gran salud y bienestar, tenían una importantísima aplicación como defensa personal.
Al Wu Chin Si se le conoce también por el popular nombre de el "juego de los cinco animales", pues los ejercicios fueron interpretados, revisados y aumentados por medio de la observación de los animales terrestres y de las aves. El Wu Chin Si no sólo está basado en los movimientos, sino que también se inspira en los espíritus de los cinco animales totémicos, de modo que cuando se practica el método se debe imitar la manera de andar y moverse de dichos animales, con la misma fuerza, la misma gracia y la misma habilidad
Los animales imitados por "el juego de los cinco animales" son: el ciervo, el mono, el tigre, el oso y la cigüeña. Cada una de estas imitaciones servía y sirve para un propósito concreto: el juego del ciervo relaja los músculos y ayuda en la flexibilidad de la columna vertebral, el juego del mono aumenta la agilidad de los miembros, el juego del tigre es excelente para fortalecer la totalidad del cuerpo, el juego del oso es muy bueno para los órganos internos, y el juego de la cigüeña es escelente para los pulmones y, además, ayuda a la circulación sanguínea; de esta forma aparecen técnicas como: "el ciervo esconde su cuello", "el mono coge la fruta", "el tigre baja de la montaña", "el oso lanza zarpazos", o "la cigüeña abre las alas".
Se cree que estos ejercicios, fueron los que inspiraron la introducción de los animales en los estilos de boxeo chino, ya que en los ejercicios avanzados se enseña la aplicación del "juego de los cinco animales" en combate. Muchas de estas técnicas animales fueron redescubiertos siglos después por los maestros del Templo Shaolín.
También es muy posible que el Wu Chin Si formara parte de las enseñanzas que le trasmitiera Su Chuen a Tien Chai, el fundador del estilo Chai Ti Fu, ya que los movimientos en ambos estilos son suaves, flexibles y largos, al tiempo que la respiración es relajada y natural (contrariamente a los estilos duros, cuya respiración es forzada por los músculos abdominales). Los movimientos corporales están en completa coordinación con la respiración lo que se traduce en una inteligente manipulación de las fuerzas yin y yang, y como consecuencia el chi crece y se educa.
La eficacia de Wu Chin Si como método terapéutico no entra dentro de los límites de la creencia, sino que está ampliamente demostrado por el Servicio de Traumatología y Rehabilitación del Instituto de los Deportes de Shangai y por otros organismos oficiales.
En el citado hospital se vienen obteniendo desde hace varios años magníficos resultados en el tratamiento de todo tipo de dolores musculares, tendinosos, neurológicos..., así como en el de las escoliosis, oteoporosis y otras patologías vertebrales. Por otra parte, la práctica del "juego de los cinco animales" permite multiplicar las defensas del organismo, mejorar las funciones respiratorias, mantener la actividad funcional en los ancianos, acelerar la velocidad de recuperación de las lesiones y enfermedades, etc.
La magia de estas "milagrosas" y rápidas curaciones se halla en el mejor flujo de Chi por todo el organismo, y además (y esto lo digo para los que no creen en la realidad de la energía interna) en la mejora de la circulación sanguínea y linfática, con lo que se aumenta también la oxigenación y la nutrición de los tejidos lesionados, con lo que también aporta otro dato en vías de la curación de la patología.
La explicación de estos ejercicios como método de prevención de enfermedades está en que, al realizarlos, se refuerzan los músculos y vasos sanguíneos del corazón, con lo que el caudal cardiaco aumenta, al tiempo que disminuye su frecuencia y, por lo tanto, el corazón realiza menos esfuerzo. Por otra parte, también se refuerza la producción de linfa en los ganglios, con lo que la producción de anticuerpos se acelera.
Como método de autodefensa es conveniente pues, además de enseñar a encadenar técnicas marciales, enseña perfectamente a coordinar la respiración con el movimiento y a regularizar la circulación muscular e intermuscular, con lo que la fuerza interna queda liberada en cada movimiento. Estos son algunos de los secretos de la eficacia de las Artes Marciales Chinas.
FINAL
Desde un punto de vista marcial, con el talento analítico y creador del médico Hua T'o, el progreso de las Artes Marciales se hizo más claro y concreto, de forma que en esta época, finales de la Dinastía Han posterior, la proliferación de estilos de Kung-fu fue en aumento, y, aunque la mayoría de estos estilos no hayan llegado en su estado puro hasta nuestros días, en la Dinastía Ming, la llamada "Edad de Oro del Kung-fu", se redescubrieron sus técnicas y se volvieron a codificar, con lo que han llegado hasta nuestros días ligeramente desvirtuadas en la mayoría de los casos.
Desde el punto de vista terapéutico el Wu Chin Si fue un gran logro, pues basándose en él se han creados nuevos y modernos ejercicios energéticos, como es el caso del Lian Gong Shi Ba Fa.
El basarse en el método creado por Hua T'o para crear nuevos ejercicios dirigidos a fortalecer y flexibilizar el cuerpo, así como para educar el cauce de Chi, no es algo nuevo, pues es muy posible que hace siglos P'u Ti Ta Mo, el legendario Bodhidharma y patriarca de Shaolín, se basara en estos ejercicios taoistas para crear su Shi Pha Lo Han Sho, o "los dieciocho movimientos de las manos de Lo Han".
De todas formas la importancia del Wu Chin Si en la historia de las Artes Marciales Chinas es innegable, y aún se puede disfrutar de sus beneficios, tanto terapéuticos como marciales.
F. Javier Hernández Pérez
me llena de inspiracion
ResponderEliminarMuchísimas gracias,
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